Estuche DIY

¡Hola! Ya sé que se está por acabar el día pero, como se suele decir, más vale tarde que nunca. Hoy te traigo otra idea para hacer un estuche fabuloso. En esta ocasión necesitaremos:

Forro, cartulinas o papel... algo para envolver que tenga un diseño que nos guste.
El eje central de un rollo de papel
Cinta de celo
Tijeras

Lo primero que haremos será cortar el eje del rollo de papel para que quede un poco más pequeño (dos dedos menos) que un lápiz de un tamaño normal.

Para la base del rollo usaremos exactamente el forro o cartulina con el que vayamos a decorar el estuche. Si es duro, mejor. Con la base del cilindro guíate para dibujar un círculo en el papel seleccionado. Posteriormente, haz cuatro rectángulos, uno en cada lado, de tal manera que si los doblas te quede algo así:

Pega la base con cinta. Asegúrate de que no quede ninguna hueco entre esta y el cilindro.

Ahora ya puedes forrar el cuerpo del estuche por completo.

Pues bien, solo nos falta hacer la tapa.

Para que esta se pueda encajar, deberás recortar un rectángulo de cartulina tan grande como el perímetro del círculo del cilindro. Cuando lo tengas, haz un rollito, introdúcelo en el estuche, deja que se abra y, cuando se amolde al tamaño de este, pégalo con cinta. Esta parte tiene que ser igual o un poquito más grande que la altura de un lápiz.

Para la tapa, repite el procedimiento que usamos para realizar la estructura del estuche. Esta, sin embargo, tiene que medir lo mismo que el papel saliente que acabamos de colocar.